“Murió en la misma casa de campo que su padre, en los idus de septiembre, dos años, dos meses y veinte días, después de haberlo sucedido a los 42 años de edad. Cuando se divulgó la noticia, todo el mundo se lamentó públicamente como habría hecho en caso de haber perdido un familiar, el Senado corrió a la curia sin esperar a ser convocado por un edicto, y, mientras las puertas estaban aún cerradas, y luego cuando fueron abiertas, tributó al difunto tantas muestras de gratitud y lo colmó de tantas alabanzas como nunca le había dedicado estando vivo y en su presencia”.
Suetonio. Vida del Divino Tito, 11
Al finalizar los juegos de inauguración del Coliseo, Tito dedicó el Anfiteatro junto con unas termas que llevaban su nombre al pueblo romano. Acto seguido partió de viaje, alojándose en la misma villa donde murió su padre en Reate. Cayó enfermo durante la travesía por lo que hubo de ser trasladado en litera hasta la casa de campo, y a los pocos días murió a causa de unas fiebres. Era el 13 de septiembre del año 81 d.C., y contaba sólo con 42 años de edad.
A pesar de que casi todo el mundo acepta la muerte de Tito debida a causas naturales, los historiadores no han dejado de especular sobre la causa de la enfermedad que contrajo y sobre el hecho si su hermano Domiciano no estuvo implicado de alguna manera en su muerte. Algún escritor antiguo afirma que fue envenenado por Domiciano, mientras que otros como Dión y Suetonio lo único que afirman es que Domiciano no prestó el auxilio médico que necesitaba su hermano, dejándolo morir.
Ambos historiadores afirman que la única frase que pronunció Tito al morir fue “sólo he cometido un error”. Mientras Suetonio divaga sobre si se refiere a la posible infidelidad del emperador con la esposa de su hermano, Domicia, Dión afirma que se refería a que debía haber mandado asesinar a Domiciano cuando descubrió la conjura que preparaba contra él. “Mientras aún respiraba y todavía tenía posibilidad de recuperarse, Domiciano para acelerar su final, lo habría puesto en un baúl lleno de nieve, haciendo creer quizá que la enfermedad requería de la administración de frío. En cualquier caso, entró en Roma a caballo mientras Tito aún estaba vivo, fue al campamento [de la guardia pretoriana], y allí recibió el título y la autoridad de emperador, tras dar a los soldados todo cuanto su hermano les había dado. Tito, al expirar, dijo: “sólo he cometido un error”. No aclaró cuál fue ni nadie más supo identificarlo con certeza. Se han conjeturado una y otras cosas. El punto de vista predominante es el de los que dicen que se refería a haber seducido a la esposa de su hermano, Domicia. Otros- y son estos a los que yo me inclino a seguir- dicen que lo que quiso señalar como su error fue el no haber matado a Domiciano cuando le descubrió conspirando abiertamente contra él, sino haber elegido por el contrario cumplir su destino a manos de su rival, y haber entregado así el Imperio de los romanos a un hombre como Domiciano". (Dión Casio, Historia Romana, Libro LXVI, 26).
Según el Talmud (obra judía) Tito murió a causa de un mosquito que se le introdujo por la nariz y anidó en su cerebro causándole grandes dolores como venganza divina por la toma de Jerusalén. Esta teoría tampoco está comprobada, y es probablemente fruto del odio que sentían los escritores judíos hacia el emperador que había destruido el Templo de Jerusalén.
Así Tito murió sin que su Principado dejara nada digno de mención salvo varios desastres naturales de gran entidad y la inauguración del Coliseo. Uno de los primeros actos de Domiciano como emperador fue deificar a su hermano, algo aceptado por unanimidad pues Tito era muy querido por todos, incluido los historiadores romanos que han dejado una visión muy favorable de él.